Rodrigo Pavez Cuadra, profesor de la Universidad de Concepción en la Facultad de Educación fue invitado a participar del espacio el programa radial “Conversando sobre educación” para exponer su punto de vista sobre dos situaciones muy latentes en la boca de varios profesores y estudiosos: la educación de calidad y la calidad en la educación.
El académico, Doctor en Educación, despejó ambos conceptos afirmando que el sentido de educación que el busca transmitir a sus alumnos es no solo de entregar contenidos, sino tolerancia, valores y afectos.
“La calidad también puede definirse como eficacia o eficiencia. Yo trato de ir un poquito más allá.” Dice el experto. Afirmó que prefiere calidad para todos, donde cabe una formación mucho más amplia que el registro que se puede obtener en evaluaciones a nivel macro y micro.
“Si se habla de calidad en la educación, ésta se restringe a los resultados, a los registros que entregan las pruebas estandarizadas a nivel nacional. La educación de calidad por otra parte, es algo que tiene como base la tolerancia y es de un amplio abanico de posibilidades”, reflexionó.
Pavez le dice a sus alumnos: “El día de mañana ustedes serán profesores. Dense cuenta del compromiso social que tienen.” Esto frente a las grandes críticas que nacen de las incógnitas presentes en la sociedad actualmente: ¿Quién tiene la culpa de los fracasos a nivel de país en la educación pública? ¿Quién establece la calidad? El docente respondió “de los profesores”.
Por ello, Rodrigo dice preparar a sus alumnos para que éstos adquieran las competencias y habilidades necesarias para enfrentar el escenario nacional que enfrentarán luego de egresar.
Finalmente aprovechó de manifestar su inquietud frente a la propuesta entregada al Ministerio de Educación que pretende fusionar filosofía con educación ciudadana. “Yo siento que se está cometiendo un error”. Expresó Pavez, quien también es Magíster en Filosofía Moral.
“En filosofía se habla de ética, antropología y otros elementos esenciales para comprender”. Mientras que, a su juicio, la educación cívica no asegura que los estudiantes de conviertan en buenos ciudadanos.
Agregó además las consecuencias que nacerían de concretarse este proyecto. Es decir, como afectará a los interesados en estudiar pedagogía en filosofía, quienes cubrirán las horas perdidas del ramo, quienes las tomarían, etc. “Estamos ante un arrinconamiento de lo que es un saber universal y que es transversal a todas las disciplinas.”