“Hablar de sexualidad con nuestros hijos es un proceso continuo, sistemático y permanente”

Rodrigo Jarpa Sexólogo:

“Hablar de sexualidad con nuestros hijos  es un proceso continuo, sistemático y permanente”

Así lo manifestó el profesional en actividad dirigida a padres y apoderados del Colegio Concepción Chiguayante, en el marco del Programa de Sexualidad y Afectividad para alumnos de séptimo a cuatro medio.

Ante más de 200 asistentes se llevó a cabo la Charla “Sexualidad y Afectividad” que dictó, en el Colegio Concepción Chiguayante, el reconocido sexólogo Rodrigo Jarpa, con la finalidad de entregar herramientas sobre afectividad y sexualidad a los padres y así llegar a los niños y jóvenes de manera eficiente, prolongada y dirigida.

Durante la actividad, efectuada el jueves 27 abril, el Rector Vladimir Ramírez Rebolledo, aseguró que esta actividad es el puntapié inicial del Programa de Sexualidad y Afectividad, elaborado por el Colegio Concepción Chiguayante, bajo los lineamientos del Ministerio de Educación y en concordancia con el Modelo de Desarrollo Moral para estudiantes de 7° básico a 4° medio, teniendo como objetivo contribuir a la formación integral de los estudiantes en base a su sexualidad, afectividad y género, abordando temáticas y ámbitos del desarrollo personal, intelectual, moral y social.

Dentro de esta área, la familia, padres y apoderados contribuyen desde su particularidad y experiencias en el proceso formativo, transmitiendo a sus hijos los conocimientos y valores sobre sexualidad y afectividad que se ajustan a sus creencias y costumbres. De allí la importancia de entregar a niños, jóvenes, padres y apoderados, las herramientas que les permitan asumir responsablemente su sexualidad y relaciones de afecto, promoviendo su libertad de conciencia y su autonomía progresiva.

Rodrigo Jarpa manifestó que la sociedad ha puesto el énfasis en erotizar desde lo externo, en la inmediatez y lo superficial, aspectos perecederos a corto plazo, transformándose en una sensación de vacío y búsqueda constante, lejos de la plenitud o saciedad. “Cuando puedes comer todos los chocolates que quieres, comes algunos que ya no te apetece y luego pierdes el deseo y no pruebas más chocolate” aseguró el profesional, refiriéndose a la necesidad por desarrollar la intimidad con otro, un encuentro sincero.

Agregó que los niños actúan a través de la imitación de conductas, por tanto los discursos no son importantes si no resultan coherentes con el actuar. Insistió en la necesidad de poner límites, hablar con honestidad, trabajar con refuerzos positivos sorpresivos y no castigos, sin o demonizar actos o situaciones.

“Decirle a los niños o jóvenes que la sexualidad es mala, riesgosa y reducirla sólo a las enfermedades de transmisión sexual o embarazos no deseados no es el camino. No se les cuenta sobre el afecto, lo positivo, el encuentro, la satisfacción de entrega o el mero placer”. Comentó que no existe “una conversación” o “el minuto de hablar” es un proceso continuo, permanente de palabra y acción.

El profesional destacó la incidencia en la instrucción de los padres, el conocimiento interno de quienes tutelan a los niños y jóvenes en el accionar de éstos y por ende del rumbo de la sociedad. Destacó el trabajo que emprendió el Colegio, haciéndose cargo de una situación que, dado el contexto, se torna necesario abordar desde diferentes frentes, con la finalidad única de contar con adolescentes que vivan de manera sana y afectiva su sexualidad, y en diez años más; adultos con las herramientas necesarias para guiar a su descendencia.