María Graciela Escárate Silva, Rectora (I) del Colegio Alonso de Ercilla: “Lo más importante es enseñar con el corazón”

Con una extensa y destacada trayectoria de 26 años siendo parte de la Corporación Educacional Masónica de Concepción, como docente, Orientadora, y hasta hace poco como Inspectora General del Colegio Técnico Profesional Los Acacios, María Graciela Escárate Silva, asumió el 01 de marzo el desafío de liderar el Colegio Alonso de Ercilla como Rectora Interina.

Casada y con tres hijos, dos ya titulados y uno estudiando en la universidad, María Graciela Escárate Silva, es Profesora Básica de la Universidad de Concepción y ha realizado dos magister en el área educativa, además de varios diplomados y cursos. Se describe como una persona apasionada por su familia, la danza y la educación, esto último algo heredado de su madre quien fue profesora de Inglés.

En su trabajo su sello permanente ha sido el entusiasmo, compromiso, creatividad, cariño y afecto como factores determinantes para entregar a los estudiantes una educación sustentada en los valores que les sirva y los marque por toda su vida. A pocos días de asumir este nuevo cargo relata que la experiencia,  “Ha sido ardua, debido a que aún estamos en tiempos de pandemia. Afortunadamente, alcanzamos a estar un tiempo de forma presencial y pudimos juntarnos con todo el personal y así pude conocerlos, hablar con ellos y empezar a marcar el liderazgo basado en el apoyo y confianza, además de organizar estrategias de acompañamiento”.

¿Cómo toma este desafío de asumir el liderazgo del Colegio Alonso de Ercilla?

Lo tomo como un enorme desafío en mi vida personal y profesional, con mucha esperanza de poder dar lo mejor, ya que estamos en un proyecto educativo muy importante, donde quisiera involucrar a todos.

Espero liderar con mucha disposición y entregar todo mi conocimiento y años de experiencia. Hay una máxima que siempre manejo, porque la tengo desde que comencé a trabajar y es “tomar todo con afecto y cariño”, y cuando asumo este desafío esa es la base que me va a guiar, teniendo altas expectativas en lo académico, cognitivo y afectivo, en conjunto con el gran grupo humano que me toca liderar. 

¿Cómo fue el cambio desde el Colegio Técnico Profesional Los Acacios al Colegio Alonso de Ercilla?

La verdad es que ha sido grande, yo llevaba 26 años trabajando en el Colegio Técnico Profesional Los Acacios, en el que partimos tres profesoras en un establecimiento chiquitito, de madera con 56 alumnos. Hoy el mismo colegio tiene 1600 estudiantes y tres edificios enormes con una infraestructura maravillosa, con personas que he llegado a querer y  tener lazos profundo de respeto, confianza y apoyo.

En ese sentido, hacer este cambio no fue fácil, fue algo que lo pensé mucho. Averigüé lo que más pude sobre el Colegio Alonso de Ercilla y vi este desafío de trabajar en una comuna con necesidades muy similares al sector de Barrio Norte, donde se emplaza Los Acacios, con familias deseosas que sus hijos puedan tener mejores horizontes de vida. Así que un día vine al colegio, lo conocí y  me dije  aquí puedes contribuir con tu experiencia.

Ahora estoy muy estimulada con todos, los profesores, niños y apoderados, siento que hay algo que está ocurriendo en este colegio en lo que se puede aportar y eso es creer en los estudiantes, en tener altas expectativas y entregar una educación de calidad con fuerte formación humanista y valórica, para convencerlos que todo lo que ellos quieran lo pueden lograr.

¿Cuáles son los desafíos para el colegio?

Por un lado esta apoyar a los profesores en materia de resiliencia, ya que si los profesores se sienten bien y acompañados, nuestros estudiantes van a recibir lo mejor de ellos.

Otro aspecto es que tenemos que apoyarlos a nivel educativo, para que las clases sean más efectivas. En esto es importante el trabajo entre pares, porque a veces más que traer expertos de afuera, la experiencia se puede encontrar en el mismo colegio y por esto queremos abrir los espacios para que se reúnan y compartan sus experiencias, hagan sus prácticas y uno aprenda del otro.

También queremos apoyar a nivel tecnológico y las formas de usar el internet para que tengan un mayor desarrollo en el curriculum y que nuestros estudiantes aprendan a usarlo, ya que no todos lo saben de la forma más optima.

En esta misma línea, estamos apoyando a los estudiantes con préstamos de tablet con internet.  El desafío es integrar cada vez más la tecnología como parte del desarrollo humano, esto perfeccionando nuestro conocimiento para estar al día con el vertiginoso desarrollo de la sociedad y entregarle las herramientas adecuadas a los estudiantes. Esto siempre teniendo presente que lo más importante es enseñar con el corazón, porque al igual que con la tiza y la pizarra, la tecnología puede cambiar y evolucionar, pero lo que se enseñó con afecto nos acompañará durante toda nuestra vida.

¿Qué dificultades plantea el trabajo telemático en el caso particular del colegio y de qué forma lo están abordando?

Respecto a ese tema, nos hemos enfocado en la conectividad de los estudiantes, de saber cómo está la situación de cada uno de ellos y revisar caso a caso para ver porque no tienen los medios tecnológicos, si no tienen internet o si viven fuera del área de cobertura. En nuestro caso tenemos un catastro de 15 estudiantes en esa condición, para ellos se prepararon las opciones de entregar guías de trabajo impresas o, para lo que tienen computador, se podrán llevar la grabación de las clases que trasmitimos de forma telemática en un pendrive.

¿Qué mensaje le entregaría a los apoderados respecto al proceso de retorno a las aulas?

Queremos que toda la comunidad educativa se sienta segura en el momento de retornar a clases, que sepan que el colegio cuenta con todas las medidas de resguardo.  Hemos preparado un protocolo de vuelta a clases que los apoderados y estudiantes ya conocen y que, entre otras cosas detalla que, trabajaremos con aforos limitados y forma alternada con un grupo una semana y el otro en la siguiente, mientras que las clases serán trasmitidas telemáticamente para quienes deban seguirlas desde sus casas.

En este sentido, es importante el apoyo de la familia, que conozcan las normas para que este sistema de retorno se pueda dar e inculquen a sus hijos las normas del lavado recurrente de manos, el uso de mascarilla y mantener la distancia social.

Quisiera enviarles un fraternal saludo, que sepan que este colegio está para apoyarlos, acompañarlos y guiarlos en este periodo difícil de nuestras vidas.

Se hace comunidad cuando todos tenemos una meta común, sus queridos hijos e hijas.