Colegio Concepción Fraternidad realiza ceremonia homenaje en memoria de Maximiliano Díaz Soto

En una emotiva y solemne ceremonia, el Colegio Bicentenario de Excelencia Concepción Fraternidad, rindió homenaje a Maximiliano Díaz Soto, ex presidente de la Corporación Educacional Masónica de Concepción, COEMCO, con la colocación de una placa y nombramiento de la Biblioteca y Centro de Recursos de Aprendizaje, con su nombre.

La ceremonia tuvo lugar el jueves 22 de agosto, y contó con la participación del hijo de Maximiliano Díaz, Marcelo Díaz y su señora, Carla Quezada, el Presidente de la COEMCO, Alejandro Navarro Torres y el director corporativo, Lucio Kries Figueredo; el Gerente General, Jaime Gutiérrez Higueras; el Gran Delegado Jurisdiccional del Gran Maestro de la Jurisdicción Concepción Sur, Héctor Palavecino Wigand; además de miembros de la comunidad educativa del Colegio.

En la oportunidad, el Jefe UTP, Rodrigo Contalva realizó una reseña biográfica de Maximiliano Díaz, donde destacó su vida familiar, personal, profesional y vínculo con la educación, con COEMCO y, especialmente, con el hoy Colegio Concepción Fraternidad.

A continuación, el director corporativo, Lucio Kries, entregó un saludo en representación del Directorio de COEMCO, oportunidad, en la cual recordó las palabras del ex presidente, dirigidas en la ceremonia de la colocación de la primera piedra del entonces Colegio Fraternidad, donde señaló: “En este Edificio se cultivará la enseñanza y la perfección, aquí nuestros alumnos recibirán esa luz eternamente creadora y en eterno retorno”.

En este sentido, expreso que sus palabras, sin lugar a dudas, hoy se ven reflejadas a través del valor diferenciador de este colegio, como un centro educativo innovador, vinculado con su entorno, que promueve un espíritu emprendedor en sus estudiantes, todo esto englobado en una formación ética y valórica que constituye el sello de los establecimientos de la COEMCO.

Posteriormente, el rector Víctor Schuffeneger, tuvo emotivas palabras, manifestó “Cómo olvidar que es en su gestión que se origina este Colegio que hoy atiende a más de 1.200 alumnos y alumnas, que encabezó un proceso de construcción que nos congregaba semana a semana, aquí en la obra, para seguir y monitorear el avance de la misma y asegurar que en marzo de 2012 estaría listo para iniciar la navegación este proyecto que se ofrecía al sector Portal de San Pedro, Lomas Coloradas”.

Por estos motivos, señaló que el Consejo de Profesores propuso que la Biblioteca y Centro de Recursos de Aprendizaje llevara su nombre, “como forma de reconocerle y rendirle homenaje póstumo, pero también como una forma de anclarlo a la historia de este Colegio y para la recordación diaria de quienes concurren a este centro educativo diariamente”.

Y agregó “El nominar este espacio no es casual, pues está ligada a una actividad que le movía y motivaba, la lectura, la escritura, la investigación y en este lugar convergen esos quehaceres por los que se le distingue y en los que hizo importantes aportes, fundamentalmente en acopio y preservación de la Historia de la Masonería de Concepción y su entorno”.

Por su parte, en nombre de la familia, Marcelo Díaz agradeció el homenaje realizado a su padre, “es un gesto que no solo su memoria, sino que también celebra su dedicación a los principios que siempre amo profundamente. Esta biblioteca no es solo un espacio para el aprendizaje, sino también un testimonio del compromiso de mi padre en la formación de las nuevas generaciones».

Por último, Alejandro Navarro, Víctor Schuffeneger, Marcelo Díaz y Héctor Palavecino procedieron a descubrir la placa donde quedó estampado el nombre del Maximiliano Díaz Soto en la Biblioteca y Centro de Recursos de Aprendizaje del establecimiento. La cuota musical de la jornada, corrió por parte de un estudiante del Colegio Concepción Fraternidad.