Hay momentos que marcan un antes y un después en la vida de una comunidad educativa, instantes que no solo se escuchan, sino que se sienten profundamente en el espíritu. Uno de estos momentos, fue el que se vivió en la Sala de Artes Escénicas de la Municipalidad de Chiguayante, donde los asistentes fueron testigos del emocionante debut exclusivo de la Orquesta de Cuerdas de los Colegios Concepción. Proyecto que surge de una convicción institucional profunda de que el arte es una forma esencial de educar y formar humanidad. La presentación demostró que los buenos resultados no se improvisan, sino que se construyen con disciplina, constancia y trabajo colaborativo.
Este evento inédito, se dio en el marco de la celebración de los 71 años de la Corporación Educacional Masónica de Concepción (COEMCO). La actividad se realizó el Lunes 24 de noviembre reuniendo a una orquesta integrada por 40 niños, profesores y músicos acompañantes. Los jóvenes talentos provienen de seis colegios de la Corporación, incentivando la unión de todas las comunidades educativas en torno a esta expresión artística.
Para la Corporación, la Orquesta de Cuerdas no es solo una actividad extracurricular; es la manifestación viva de su visión y misión educativa. COEMCO busca formar personas íntegras y líderes, con una visión de futuro que les permita contribuir al bienestar de la sociedad. Este objetivo se impulsa a través de una educación creativa, crítica y basada en los principios del humanismo y el laicismo, siempre al servicio de la libertad de pensamiento. El concierto se convirtió en un catalizador de los valores institucionales: la libertad, la igualdad, la fraternidad y la solidaridad, vividos con respeto, responsabilidad y tolerancia. El resultado del evento fue un profundo orgullo y una tremenda alegría, al ver a los estudiantes exhibir su capacidad interpretativa, tanto en música clásica como popular.
En este sentido, Juan Eduardo Giacaman Arce, secretario y presidente de la Comisión de Posicionamiento de COEMCO, destacó la trascendencia de esta jornada para el proyecto formativo: «El balance fue que tuvimos una alegría tremenda de escuchar a estos niños en su armonía, en su capacidad interpretativa, no tan solo de música clásica, también popular. Nuestra misión es formar líderes, gente que realmente ayude a la humanidad a superarse con su aporte, su conocimiento y su arte, que es lo importante, y lo que es instructivo y creemos que instancias como esta ayudan a avanzar en ese camino. Este es un mensaje también para los apoderados para que sepan que han elegido un proyecto educativo que no solo educa mentes, sino que forma carácter; que no solo enseña contenidos, sino que cultiva sensibilidad».
El camino hacia el primer concierto fue largo y exigente. El proyecto de la Orquesta de Cuerdas, surgió en 2018 como un espacio para acercar la música clásica a niños y jóvenes, pero tuvo que superar la interrupción de la pandemia de COVID-19 entre fines de 2019 y 2022, retomando sus actividades con normalidad en 2023. La preparación para esta presentación comenzó el mes de julio, el director de la orquesta, el músico, violinista y profesor Fernando Maureira Contreras, quien asumió la dirección artística este 2025 con energía renovada, implementó un régimen de ensayos que fue aumentando gradualmente hasta alcanzar reuniones semanales todos los días sábados.
En este sentido Fernando Maureira destaca que: «Ver como han crecido los estudiantes, desde aprender a leer las partituras a presentarse ante las más de 200 personas que estaban disfrutando el concierto, demuestra que la música está más que viva y que podemos salir a la comunidad. La proyección que tenemos es salir a mostrar el trabajo que se desarrolla en cada colegio y llenar teatros».
Para los estudiantes, el concierto significó mucho más que una presentación musical; fue una experiencia de colaboración y pertenencia. La Orquesta ha logrado fomentar el sentido de pertenencia a un proyecto colectivo y el trabajo en equipo. Los jóvenes músicos no solo perfeccionaron su técnica, sino que también forjaron nuevas amistades y lazos de fraternidad entre compañeros de distintos establecimientos. Emilia Valenzuela, estudiante del Colegio Concepción Chiguayante, compartió cómo vivió la preparación y la presentación ante un auditorio lleno: “Al enterarme que iba a estar en esta orquesta me puse muy feliz, preparada y emocionada. Conocí muchas personas, hice amigas y fui conociendo a compañeros de los otros colegios”, en esta línea destacó lo que considera relevante de este tipo de instancias “que lo disfrutes mucho, que hagas amigos y amigas, y que sientas el gusto de empezar en la música.»
El concierto se dividió en dos partes. La primera incluyó intervenciones solistas de estudiantes avanzados como Simón Rojas (Colegio Concepción Fraternidad) y Daniel Valenzuela (Colegio Concepción Los Acacios), además de la presentación de Javiera Venegas (Colegio Concepción Fraternidad) interpretando «Cisne de Camille Saint-Saëns» acompañada de su profesor Antonio Velásquez. Los profesores de la orquesta también se sumaron a la interpretación con piezas como «Por Una Cabeza» de Carlos Gardel y «Palladio» de Karl Jenkins.
La segunda parte, con la orquesta completa, deleitó al público con un variado repertorio que incluyó obras como «Tango y Cha-Cha» de D.R. Bellwood, «Pizzicato Party» de Sussan H. Day, una versión de «Twinkle Twinkle Little Star» de W. Amadeus Mozart con el solista en violín José Ignacio Escobar , para culminar con piezas como “Winter From Four Season” de Antonio Vivaldi, «Todos Juntos» de Los Jaivas, «Dragon Hunter» de Richard Meyer y el enérgico arreglo «Power Rock» de Michael Sweeney, que incluyó temas de Queen..
Durante el evento, la Corporación Educacional Masónica de Concepción realizó un emotivo reconocimiento a la trayectoria, el compromiso y el aporte de don Humberto Águila Alvarado, primer director artístico de la Orquesta de Cuerdas entre los años 2018 y 2024. El homenaje también se extendió a los profesores de la orquesta, destacando su contribución al desarrollo artístico y formativo.
El concierto no solo fue un triunfo artístico, sino una reafirmación de que la educación que se imparte en los Colegios Concepción va más allá de las aulas, cultivando sensibilidad y preparando a los estudiantes para la vida. Como dijo el profesor Águila al recibir su homenaje, “el arte y la música deben seguir imperando en tiempos complejos, recordando la necesidad de sentir más el corazón que la razón”.